Publicado por Diario Libre

Con o sin COVID-19 hay que diseñar y aplicar una cultura que garantice la buena salud oral, lo cual incluye asistir al especialista periódicamente.

Mantener una higiene bucal es una cuestión de buena imagen, pero también de salud en general. La boca es un portal hacia el interior del cuerpo que debe mantenerse en condiciones adecuadas, más cuando se viven tiempos como estos en los que nos acechan patologías tan impredecibles y fatales como el COVID-19.

Además de esto, es bueno saber que descuidar la boca es ignorar la integridad del cuerpo; ya que podría ser el puente conductor hacia otras enfermedades y agravar condiciones médicas existentes en los pacientes; muchos están aún confinados por la pandemia, pero deberían recordar que salud también es prevención y seguimiento de mano de los especialistas de la medicina. Y sobre la importancia que tiene la consulta bucal en tiempos de la pandemia del COVID-19 hemos entrevistado Yiselis Portes, especialista en Odontología Estética y Restauradora.

¿Qué tan importante es la consulta dental en la prevención de enfermedades?

Visitar al especialista de la salud oral resulta de gran importancia, no solo para mantener una boca saludable, sino porque la cavidad oral es la puerta de entrada a un sinnúmero de bacterias que pueden desencadenar o complicar problemas de salud general ya existentes.

¿Cuáles patologías se pueden desencadenar o empeorar cuando nos mantenemos alejados de la consulta odontológica?

Dependiendo el estado de salud general del paciente, existen condiciones de salud exacerbadas a raíz del descuido de la salud oral. Por mencionar una muy común: en los pacientes hipertensos existe un riesgo mayor de producir infarto al miocardio por el paso de las bacterias de la cavidad oral, a través del torrente sanguíneo, a las paredes del corazón, lo cual puede causar inflamación de este órgano. Mientras que, en el paciente diabético, por lo general tiene una respuesta más lenta a los procedimientos dentales quirúrgicos, lo que los hace más vulnerables a las complicaciones.

¿Qué novedades han surgido a raíz de la pandemia, con la finalidad de satisfacer esta necesidad de los pacientes?

En odontología las normas de bioseguridad adoptadas en estos tiempos de COVID-19 son nuestro diario vivir. Los odontólogos hemos sido formados bajo estrictos protocolos de bioseguridad desde el inicio de la carrera. La novedad más bien sería reeducar al paciente sobre la importancia del cuidado bucodental de manera preventiva.

¿Cuál es la frecuencia de visitas al odontólogo que se recomienda para una persona sana y cuál para una con algún tipo de condición?

Toda persona debe visitar la consulta dental al menos dos veces por año y si tiene alguna predisposición de salud, lo ideal es tener la supervisión de un especialista de la salud oral al menos tres veces por año. Con esta acción se puede evitar o minimizar la complejidad de un tratamiento dental.

Respecto al miedo a contagiarse durante una visita al odontólogo, ¿es seguro ir a la consulta dental en tiempos de pandemia?
Sin restarle importancia a la situación sanitaria por la que atraviesa nuestro país y el mundo, cabe destacar que en la consulta dental existe un riesgo mínimo al contagio o propagación del virus, debido a los altos estándares de bioseguridad asumidos por los dentistas. A ciencia cierta, ir a la consulta dental resulta más seguro que ir al supermercado.

Datos que no puedes olvidar|

La higiene bucal es más que dientes alineados y blancos. Aunque ambos sean importantes, más lo es una cultura de higiene que dé garantía a una dentadura sana y de larga duración. A continuación, algunos consejos que ofrece la odontóloga para que los tengas presentes en tu día a día.

Los principales enemigos de la salud bucal son: tabaco, deficiente higiene oral, dieta elevada en carbohidratos y azúcares, y, por supuesto, postergar la visita a la consulta dental.

En la rutina de higiene diaria no debe faltar: el cepillado diario, tres veces al día acompañado de seda dental y enjuague bucal.

Elige un cepillo que se ajuste a tu necesidad: cada caso tiene su indicación y utilización específica. La recomendación es visitar a su odontólogo, quien tras la validación determinará qué tipo es el que más te conviene, así como la técnica del cepillado que te favorece ejecutar.